Siempre he amado el queque de zanahoria, con todo y su frosting de queso crema. A pesar de que soy 100% chocoholic, el queque de zanahoria es la segunda cosa que más me gusta.
Tristemente, siempre le agregan muchísimo aceite y ni hablar del azúcar. Lo sé, por que lo amo tanto, he hecho la receta original anteriormente.
Y seamos honestos, de vez en cuando no hace daño comerse algo que contenga azucar y sea grasoso por que yo soy fiel creyente de que el balance es la clave para mantener un estilo de vida que sea saludable y sostenible.
Pero, cuando se trata de hornear algo cuando me estoy cuidando y tengo antojo de algo rico y dulce, perfectamente puedo también modificar las recetas para que se ajusten a mis objetivos.
Asi que van a ver lo deliociosos que quedaron estos muffins, apenas para que los hagan en la casa para el compartir el fin de semana.
Mientras se hornean, mezclan todos los ingredientes del frosting y cuando ya estén frios los muffins, se lo agregan.
Reservar en la refri* aun que dudo mucho que les dure para varios dias de lo rico que está.
1 muffin: 1 harina + 1 grasa (2,7g de fibra por porción)