Existe la preocupación social de que el consumo de azúcar podría volverse ‘adictivo’ y, por lo tanto, promover el aumento de peso. Sin embargo, las afirmaciones sobre la adicción al azúcar se basan mayormente en estudios en animales, mientras que falta evidencia humana directa de síntomas de dependencia relacionada con el azúcar.
La verdad es que cuando el azúcar se combina con grasa, aumenta la palatabilidad. Esto quiere decir que sabe más rico. Cuando escribo esto, estoy pensando en donas, queques de chocolate, churros, cupcakes. Todo se resume a eso. Es muy diferente querer comerse algo similar a las reposterías que acabo de mencionar, a querer agarrar la bolsa de azúcar y comérsela a cucharadas. ¿Me explico?
Por otra parte, el azúcar no contiene fibra, tampoco proteína. Por lo que es común comerse un confite o chocolate y querer comerse otro o sentir hambre al ratito.
Entonces pensemos que todas estas características pueden hacer que para muchas personas sea hábito comer este tipo de cosas muy seguido, por que sabe rico, y da satisfacción, se libera serotonina y dopamina, hormonas que nos hacen sentir bien.
Un estudio examinó en una muestra de participantes humanos si los alimentos que contienen principalmente azúcar podrían causar problemas ‘similares a la adicción’ que cumplen con los criterios clínicos de dependencia de sustancias, y también si esto a su vez se relaciona con el peso corporal. Se encontró que el consumo de azúcar en exceso evidentemente sí puede afectar el peso corporal, sin embargo no se encontró relación alguna con síntomas de otras adicciones, ni tampoco se acerca a los criterios que determinan las mismas.
Entonces, la recomendación general es evitar lo más que se pueda alimentos procesados con azúcares añadidos, por que no es el par de cucharaditas que usted le agrega a su café todas las mañanas; es el cupcake de las tardes, más el helado después del almuerzo, el jugo de cajita para el desayuno y el chocolate después de la cena.
Aprendamos a comer con medida y balance; si usted disfruta de este tipo de cosas y tiene el hábito de consumirlos frecuentemente en el día, vaya disminuyendo poco a poco. Cada día intentar comer una cosa menos, o tomar una mejor decisión.
Un hábito se construye en 21 días, el cuerpo puede acostumbrarse a absolutamente todo. Se trata de simplemente saber elegir y tomar potestad de lo que decidimos comer.
*En el caso de deportistas y atletas, ellos sí pueden decidir ingerir más azúcar ya que es útil alrededor de entrenamientos o competencias* Para la población regular.y saludable, se recomienda no excederse de un consumo de más de 10% al día.
Así que no es adicción, es simplemente preferencia por comer estas cosas, hábito de elegirlas en algunos casos diariamente.
Les comparto algunas imágenes informativas sobre productos procesados y su contenido de azúcar.
Quise compartirles esta información, dado a que muchas veces no tenemos idea de cuánto azúcar estamos consumiendo. Por supuesto, la idea no es dejarlo de comer del todo si es algo que realmente disfrutamos y nos gusta. Pero de eso trata el balance, que estos alimentos no sean parte de su dieta diaria, pero que pueda comerlos con paz de vez en cuando, cuando haya algún antojito.
En conclusión, no hay adicción al azúcar, es el hábito de consumirla a diario sin darnos cuenta.